A medida que las diferentes industrias se desarrollan, la prevención de riesgos químicos adquiere mayor importancia, en especial para los colaboradores que intervienen en la creación de productos que pueden llegar a ser peligrosos si no se manejan con los uniformes correctos o protocolos que garanticen un alto nivel de seguridad durante sus gestiones.
La exposición inadecuada de la piel ante ciertos tipos de químicos puede ir desde simples laceraciones o alergias hasta problemas de salud que incluso pueden atentar contra la vida de la persona por no haber usado el uniforme correcto para un determinado ambiente o tareas a realizar.
Importancia de los uniformes para la prevención de riesgos químicos
La importancia de los uniformes diseñados para la prevención de riesgos químicos va más allá de solo proteger al colaborador de alergias sencillas como puede ocurrir de manera ocasional a quienes se encuentren leyendo esta nota, sino también de salvaguardar la integridad física de aquellos que se encuentren manipulando estos productos frente a graves riesgos como son:
- Quemaduras.
- Cambios permanentes en el color de la piel.
- Piel carcomida por exposición directa.
- Acné en la piel también conocido como ‘’cloro acné’’.
- Cáncer de piel.
- Daños al sistema respiratorio.
- Dermatitis extrema.
- Destrucción del tejido en donde entra en contacto el químico.
Cada uniforme cuenta con especificaciones que se adaptan a la complejidad tanto del ambiente como del químico a tratar, pero, entonces ¿cuáles son los materiales más resistentes para este tipo de labor?
Las telas más resistentes y sus características
Cuando hablamos de prevención de riesgos químicos pocas telas cumplen su propósito de proteger la piel como el Nylon y Poliéster, mismas que son empleadas en el diseño de un sinfín de productos como las tan populares chamarras, camisolas, pantalones, playeras e incluso uniformes tácticos para otras tareas de mayor rigurosidad y exigencia.
Entre algunas de las características en los uniformes para la prevención de un contacto directo con químicos tenemos la poliamida repelente de líquidos, las bolsas internas con cierre, las aberturas con cierre justo debajo de los brazos, las infaltables bolsas diagonales, cierre en la parte trasera del cuello, ajustador en los puños para elevar el hermetismo frente a tales químicos y otras flexibilidades que protegen a quien los manipula.
Es importante destacar que además de contar con uniformes que disminuyan el riesgo de accidentes químicos, el estricto seguimiento de los protocolos de seguridad no debe dejarse nunca de lado, ya que estos aumentan de manera eficiente la seguridad no solo de un colaborador en particular, sino también de todo el resto del personal en áreas circundantes.
Con el fin de hacer más eficiente la prevención de riesgos químicos, siempre se recomienda seguir protocolos como evitar comer, beber o maquillarse en el área donde están almacenados los químicos, evitar guardar alimentos o artículos personales en el área, evitar bloquear las rutas de escape, conservar el orden y la limpieza en la zona de trabajo, asegurarse de que tanto las paredes y el techo tengan por lo menos un metro de distancia de los productos químicos almacenados, entre otros más que podrían ser recomendados por asesores in situ.